El pasado martes 1
de abril fue un día importante para Madrid musicalmente hablando, en concreto
desde la órbita del rap. Y es que en la Sala Penélope se reunieron sobre un
mismo escenario y bajo el nombre de Serial Killers nada más y nada menos que
Xzibit, B-Real de Cypress Hill, y Demrick, con Julio G a los platos. De los dos
primeros poco podemos añadir que no se
sepa ya: mc’s con trayectorias repletas de éxito y canciones que suenan en el
mundo entero y grandes personajes televisivos vinculados al mundo del show por
definición. Tampoco hace falta demasiada presentación para Julio G: una “West
Coast legend”, como le describió su compañero B-Real, haciendo eco así de la
gran influencia que este dj y productor ha tenido en el gangsta rap. Por último, Demrick -también conocido como Young De-
llegaba con ganas de dar la razón a aquellos que le definen como gran promesa
de la Costa Oeste y de consolidarse como la tercera pata lírica de este
ambicioso proyecto que está presentándose en sociedad por toda Europa.
Los primeros temas, pertenecientes
a su trabajo conjunto Serial Killers Vol.
1, hicieron al público olvidar de inmediato la hora de retraso con la que
comenzó el show. Temas que hablan de la calle, de competición, de fumar… Lo que
es la esencia del rap West Coast, en definitiva. Tras esta primera parte algo
más actual, era el momento de los grandes clásicos, esos que son conocidos por
todos. Sonaron “X”, “Phenom”, “Get your walk on”, “What’s the difference” o
“Front 2 back” por parte de Xzibit (que por cierto, no recordaba su primera
visita a Madrid, en el Cultura Urbana 09); y “Dr. Greenthumb, “Cisco Kid”,
“Insane in the brain” o “Yo quiero fumar mota” por parte de B-Real. Este
último, además de derrochar durante toda la noche un flow al alcance de muy
pocos, se atrevió a ponerse en los platos junto a Julio para completar una
pequeña exhibición de turntablism. Demrick, por su parte, cumplió su papel con
creces, escoltando en principio a sus dos compañeros en el micro, pero también
asumiendo el papel protagonista en varias ocasiones. Finalmente los tres
volvieron a sonar en “Don’t ya dare laugh” a modo de despedida.
Sin duda, para los
que llenaron la sala fue una experiencia inolvidable ver a estas leyendas del
rap sobre un escenario. Pero para los protagonistas la velada también fue
divertida, y tal vez algún día la rememoren si revisan lo que grabaron con su
mini-cámara o si encuentran la selfie
que se hicieron junto a los asistentes. Esperemos al menos que la próxima vez Xzibit
recuerde su paso por la capital española.
Daniel Rodríguez Plaza
0 comentarios:
Publicar un comentario